La Sinastría y el encuentro con nuestras Almas Gemelas

En una primera aproximación la sinastría consiste en comparar dos cartas natales intentando establecer los aspectos mutuos entre ambas cartas. Es decir; qué aspectos genero desde mi carta natal, hacia los planetas de otra carta natal, y cómo estos aspectos se manifiestan desde el vínculo que se establece. La palabra Sinastría es un término que proviene del griego σyν (syn), que significa “más” y de άστρον (ástron): que significa “estrella”. Esto podría traducirse en el concepto de juntar "más estrellas", entendiéndose como el análisis y comparación de las cartas astrales de distintas personas.

Es aquí donde la astrología ha podido desarrollar una de las técnicas más interesantes desde el punto de vista de la interpretación, que permite determinar mediante la comparación y/o fusión de distintas cartas natales, si una sociedad, una amistad, una pareja o un proyecto en común puede prosperar o no, y hacia dónde o en qué sentido avanza ese vínculo o esa relación. No solo si avanza, ya que también permite determinar si se detiene, si es factible, si las personas son compatibles, y desde donde se establece la relación.

El encuentro con nuestras Almas Gemelas

Tal vez este punto sea para la sinastría algo así como “la frutilla del postre”. El sueño de todo ser que “busca” es el de encontrar alguna vez a ese ser que refleje en sí mismo todo lo necesario para ser considerado un compañero de viaje. Almas gemelas, compañeros de viaje, príncipes azules, espíritus compatibles... todas frases que guardan en sí misma la idea, en la mayoría de los casos esquiva, de encontrar a ese ser que nos complementa, que nos completa, con el que no hace falta ya mencionar una palabra pues los sentimientos alcanzan para comprenderse mutuamente.

¿Sabemos que buscamos cuando queremos encontrar a nuestra alma gemela, o solo lo presentimos? Lo más probable es que lo que con seguridad sabemos es aquello que no queremos.

La mayoría de las escuelas espirituales afirma que el Alma Gemela existe, y que nosotros, alguna vez en la vida y en el mundo nos cruzamos (o nos cruzaremos) con ella. Pero solo una vez. Y esa sola vez es la que debe alcanzar para poder identificarla o, por el contrario, si no tenemos la suerte o la claridad de darnos cuenta, dejarla pasar y resignarnos a continuar con una búsqueda que no conducirá a ninguna parte. Pero que la esperanza de ese encuentro es lo que los mantiene vivos.

Como contrapartida, existen aquellos que no creen en la existencia de un Alma Gemela, y en forma mucho más pragmática consideran que uno se vincula con “lo que tiene más a mano”, es decir, la vieja vecinita de mi infancia, el cajero del banco que siempre me atiende, el comerciante que veo todos los días, o aquel que está en mi radio de influencia que en la mayoría de los casos no abarca un radio muy superior al de un kilómetro a la redonda.

Pero lo cierto, y más allá de estos extremos, es que el amor se construye día a día, más allá de los enamoramientos repentinos y de las desilusiones tempranas.

Para que un vínculo sea duradero siempre deberá existir un vínculo de sinastría. Y ese vínculo no tiene por qué ser perfecto. Tiene que ser perfectible. Debe construirse día a día en función de los elementos astrológicos que ambas personas tienen en contacto.

Astrológicamente está probado que aquellos que no tienen contactos de sinastría, no prosperan como pareja ni tienen vínculos que puedan llegar a ser trascendentes. En cambio, las parejas que han durado, tienen vínculos intensos y mutuos, no todos positivos, pero sí vínculos que les permiten aprender el uno del otro, demostrando que de ese aprendizaje y de esa motivación cotidiana nacen las relaciones más duraderas.

Tal vez, la astrología tenga algunos pocos elementos para poder arriesgar si el vínculo que analizamos se trata de un Alma Gemela, y es cuando se ponen en juego otros elementos de la Carta Natal, que exceden a los mencionados.

Reiteramos que los contactos del Sol con la Luna son necesarios para una relación duradera, pero muchas de las motivaciones subyacentes en la historia de un vínculo pueden remontarse a cuestiones subconscientes o a mandatos familiares o a herencias psicológicas, o a vínculos procedentes de vidas pasadas que pueden ser bien entendidos en la comparación de Cartas Natales Dracónicas.

También los contactos de planetas con algunas estrellas fijas de primera magnitud, son indicadores de la posible existencia de Almas Gemelas que se vinculan, como también los aspectos que se proyectan sobre el Vértex de cada carta natal.

Hay que tener en cuenta, que más allá de estos contactos, lo importante aquí es como ambos lo sientan y que hacen ambos por construir una relación verdadera.


Puede pedir su turno llamando en Concordia (Argentina) a
3454249785 – 3455297201 - 3454084655

Comentarios

Entradas más populares de este blog

La parte del Infortunio en la Carta Astral

El Linaje Familiar y la Carta Natal

Nodo Norte o Cabeza de Dragón